Soy de los que cree que en la vida tenemos muchos maestros. Personas que llegan para enseñarnos algo que quizás quede ahí, latente, hasta que llega el momento adecuado y podemos darle uso.
Uno de mis maestros se llama Gustavo, hace unos 20 años que lo conozco, supo ser mi jefe y aprendí mucho de él. Dentro de esas enseñanzas hay una frase que quiero traer a colación, un día en una reunión me dijo:
“Un plan B debilita el plan A”
Es una frase que he tenido en la cabeza durante mucho tiempo y que le he dado vueltas y vueltas, en especial aplicándola a las finanzas personales y más específicamente a la jubilación.
En 1996 en Uruguay comenzaron a operar las AFAP, Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional. Hasta entonces el sistema que dominaba para nuestro retiro era el BPS que es un sistema solidario, la jubilación se paga con el dinero que aportan los que están trabajando hoy. El problema que tiene esto es que dada la campana demográfica, es difícil sostener un sistema así en el tiempo.
Las AFAP lo que hacen es invertir el dinero de los afiliados generando rentabilidad la cual sobre el final de nuestra vida laboral es entregada en mensualidades por el BSE, la jubilación. De hecho el sistema es mixto, por más que existan las AFAP siempre se aporta al BPS de todas formas.
Cuando comencé el camino de las Finanzas Personales me negué a que mi jubilación dependiera de un tercero, en este caso las AFAP. Yo quería tener el 100% del control de mi retiro y no depender de otros.
Después de esta negación un día se me acercó una persona que trabaja en República AFAP y me hizo conocer por dentro lo que era la institución.
Vaya mi sorpresa cuando me di cuenta que su negocio, su razón de ser, es ayudar a los trabajadores a que entiendan cómo funciona el Sistema Previsional. Dar herramientas para que durante la vida laboral podamos tomar acciones para asegurar una jubilación digna.
Que al afiliado le vaya bien le redunda en más ganancia. Es una relación ganar-ganar.
Ese objetivo está muy alineado con Neurona Financiera que nació para ayudar a las personas a no sufrir stress por dinero y si será un stress el momento de nuestro retiro.
“Un plan B debilita el plan A” me decía Gustavo.
El plan A es la AFAP y el plan B es lo que podamos hacer nosotros para mejorar esa jubilación. No es el uno o el otro, pueden ser ambos, por eso la frase de Gustavo no es válida en este caso. Por eso me equivoqué cuando estaba negado al Sistema Previsional Mixto, él está ahí y es bueno que así sea.
Gracias a este cambio de concepción vi el valor que tiene ser un trabajador formal, en especial cuando entendí que las rentabilidades que se obtienen por los analistas de inversión de la AFAP son muy buenas y el interés compuesto hace su magia.
Por lo tanto decidí colaborar con República AFAP en algunas campañas de concientización sobre la importante que es el buen manejo de las finanzas y el ahorro previsional.
Aquí pueden ver algunos de los videos que hicimos en conjunto y espero haya más en el futuro.
(Cualquier comentario sobre mi pobre desempeño actoral, será recibido con honor, inclusive sobra las caras poco felices que pongo todo el tiempo)
Solo me queda agradecerle a República AFAP por cambiar mi percepción y por abrirme las puertas para entender cómo trabajan y cuáles son sus valores, lo que me di cuenta que comparto.
Como siempre los prejuicios no son buenos, lo interesante es que siempre estamos a tiempo de cambiar nuestras opiniones.
2 comentarios en «República AFAP»
Hola! Cómo puedo saber si realmente me conviene afiliarme a una afap? Tengo 18 años y recién empecé a trabajar, con un sueldo bastante bajo y el cual no sé si voy a mantener en el tiempo ya que el contrato es por temporada. Me encantaría saber tu opinión si es posible, muchas gracias!
Hola Luciana, mi posición es que dado como funciona el sistema hoy, es lo más conveniente, porque ese dinero va a generar ingresos por concepto de interés compuesto.