Una persona con su neurona financiera activa sabe que es un peligro ir de compras y elegir productos que no tengan el precio marcado. Analicemos este enemigo!
Esto me pasó una vez… fui al supermercado y vi un artículo que justo estaba necesitando, pero no tenía el precio marcado. Debajo había uno igual pero más grande el cual salía muy económico…
Mi razonamiento fue sencillo… si el grande sale 10, lo cual me parece barato, el chico debe salir menos, lo cual también me parecerá barato. Así fue que lo tomé y me dirigí a la caja.
Cuando llegué a la caja, que quedaba del otro lado del supermercado había una cola importante. Luego de esperar un rato largo y me atienden, cuando me cobran mi artículo salía mucho más caro de lo que pensaba, inclusive salía más caro que el grande! Pero ya había caminado hacia la caja, había hecho la cola, había esperado… así que lo compré e inmediatamente me arrepentí.
Y si, nuestro cerebro nos juega una mala pasada, nuestro ego dice “Si dejás el artículo y te vas, te van a mirar con cara de pocos amigos” así que lo compras…
La solución, nunca jamás se debe poner en el carro un artículo del cual no sabemos el precio, por más presuposición que hagamos. Un artículo sin precio es un enemigo de todo ninja de las finanzas.